Festividad de Alasitas

¡Hola nuevamente a todos!

Este post semanal trata sobre la Festividad de Alasitas y toda la historia que conlleva esta tradición en la ciudad de La Paz, Bolivia. Nos enriquecemos de conocimiento gracias al Dr. Fernando Cajías de la Vega que nos contará sobre nuestra apreciada Fiesta de la Alasita y sobre algunos aspectos más importantes de los deseos y la abundancia.

También contamos con Mateo Alarcón León, estudiante de la carrera de Administración Turística y amigo de La Caja de Viajes, que mediante sus pasantías en la dirección de Desarrollo Turístico La Paz Maravillosa siendo parte del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, logró ser partícipe en la creación de un guiaje novedoso y llamativo, es por eso que nacieron los Tours de la feria de Alasitas y más adelante nos compartirá su experiencia.

¡Comencemos!

Fernando Cajías de la Vega

La Fiesta de Alasitas es una tradición de la ciudad de La Paz. Se remonta a antiguas tradiciones andinas que después de la colonia se convirtieron en prácticas religiosas, respondiendo a ese habitual sincretismo que caracteriza a los ritos y costumbres de América Latina. “Alasitas” que en Aymara significa “cómprame”, es una feria en la cual originalmente se intercambian objetos en miniaturas, productos agrícolas, piedras circulares de colores o con alguna particularidad. El intercambio se practicaba con alegría y con la esperanza de tener, durante el año, los productos adquiridos, que con el mayor de los deseos y aspiraciones podría llegarse a cumplir. La tradición establece que uno compre una miniatura de lo que más le haga falta en el año presente. Es necesario asistir a la feria al medio día del 24 de Enero y que un yatiri (hechicero y curandero) ch'alle (bendiga) las mismas, además los asistentes a la Alasita pasan por la Iglesia más cercana o de su preferencia para hacer bendecir las miniaturas que han comprado. También funciona cuando las miniaturas le son regaladas a uno para que este propósito se cumpla cuanto antes.

Billetes en miniatura, réplicas casi exactas de Bolivianos, Dólares y Euros, emitidos por el imaginario “Banco Central de la Fortuna o de Alasitas”, para que no falte el dinero; latas de conservas, bolsas de harina, azúcar, arroz, y todo tipo de productos alimenticios, para abastecer el hogar; maletas, con o sin papeles, pasaportes, visados y billetes de avión para viajar; gallos o gallinas de artesanía, para conseguir novio o novia; materiales de construcción, maquinaria y equipo, para terminar la casa; autitos, taxis, buses, camiones y camionetas, para tener un vehículo; títulos, postgrados y maestrías, para lograr una profesión académica; además de contar con registros civiles de fantasía donde uno puede casarse, divorciarse o sacar su certificado de defunción, títulos de propiedad, casas de 2 a tres pisos o edificios completos, para augurar una buena compra e infinidad de miniaturas interesantes capturan la atención de los que visitan la feria.

La otra figura trata de una deidad que se lo conoce como el Ekeko, o Iqiqu en lengua Aymara, es un dios andino de la abundancia, el Dr. Fernando Cajías nos comenta que no está muy claro como es a como era el Ekeko antes, algunos dicen que trata de una figura jorobada y también existen documentos en el que supuestamente tendría un parecido a Tunupa, un dios andino en forma de hombre y de mujer. Hoy en día es representado por una pequeña estatua, resultado de la transformación sincrética del dios precolombino de la abundancia, la fertilidad y la alegría, un dios que puede convertir los deseos en realidad.

El historiador Fernando Cajías también nos dice que “La Alasita tiene una tradición muy larga de la miniatura, illa y el Ekeko para conseguir un deseo. A la vez significa la fuerza del mestizaje porque hay una simbiosis entre lo andino y católico, el sahumerio y la bendición, y la illa ya es un celular, tablet, autos, edificios y otros”. El nombre de Alasita tiene diferentes significados, en aymara el más conocido es el reflexivo “cómprame”. Hace la referencia de la compra de las illas, ispallas (amuletos e imágenes), miniaturas con el atributo de volverse reales.

Mateo Alarcón

Nos cuenta que el año 2020 se encontraba realizando sus pasantías en la dirección de Desarrollo Turístico La Paz Maravillosa siendo parte del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, se propuso crear un tour llamativo para las agencias o para la gente de otros lugares. Es por eso que se realizó el Tour por la Feria de la Alasita, que consiste en un recorrido que se divide en un 70% fuera de la feria y el 30% dentro de la feria.

En el transcurso, se tocan puntos importantes como ser: la Challa, artesanías, mini comidas y también conocer lo tangible que destacan de la Alasita. El guiáje comenzaba en la Plaza San Pedro como punto de inicio, siguiendo con el Mirador Niño Kollo realizando un ch'alla tradicional regalándoles un hilito arco iris representando a los buenos deseos y hacían una mesa para seguir de manera próspera el recorrido; continuando con la casa de un artesano mostrando un poco como realizaba las mascarillas del ekeko y de la historia de los años que va realizándose. La siguiente parada era en la cafetería “La Grosería” donde podían compartir una torta de 4 sabores diferentes a degustar y en el medio tiene un Huevo de Chocolate con una Illa donde te podía tocar un regalo que podría tratarse de un auto, billetes, pasaporte, entre otros.

Como último parada era la Feria de la Alasita, comenzando en la puerta donde están las dos imágenes del Ekeko, tanto el actual como el antiguo y se explicaba el origen de ellas, continuando el recorrido se iba hasta el puesto de una de las comerciantes más antiguas, después pasaban a otro sector donde se encontraban con un artesano de camiones de madera en miniatura como el Puma Katari y el Chikititi y les mostraba cómo las hacía.

Finalizaban con el intercambio de billetes y despidiéndose de las personas que tomaban el recorrido, así es como Mateo nos dice que es una hermosa experiencia mandando saludos a todos los que lean este post.