5 Caminos Prehispánicos o del Inca importantes en Bolivia

¡Hola a todos y todas!

Esta semana le hemos dedicado una vital importancia a 5 caminos prehispánicos o del inca que destacan en Bolivia, es por eso que en este post les contaremos dónde están ubicados, en que constan, como llegar, etc.

Empecemos con…

La caminata del Choro

Es una de las caminatas más famosas en Bolivia, se inicia por una ruta ancha y empedrada que posiblemente fue construida por civilizaciones pre incas y que sirvió para unir los andes bolivianos con la amazonía, debido a sus increíbles paisajes cambiantes con picos nevados, paredes incas, lagunas, ríos, cascadas y la vegetación abundante del valle de los Yungas, se ha convertido en un ruta muy popular para los amantes del senderismo.

Es una ruta abierta por la cultura tiwanacota, posteriormente usada por los Incas y luego los españoles como una de las principales rutas de intercambio comercial entre los valles yungeños y el altiplano.

El camino de Sillutinkara

Es una antigua senda usada desde la época precolombina para llegar desde la región montañosa a los valles de Yungas. Comienza en un desvío apenas visible desde la carretera nueva a Coroico, a más o menos 2900 metros. Desde este punto hay que subir hasta una cumbre, a casi 3500 metros, en un ecosistema de transición entre el páramo y el bosque nublado, normalmente llamado “ceja de monte”. Llegar a esta cumbre y dar media vuelta por que debes volver al carro, toma un par de horas más o menos.

Todo el camino de Sillutinkara es una especie de atajo de otra senda precolombina más conocida y más transitada, llamada el Choro.

La senda empieza yendo al camino a Coroico, dos kilómetros bajando la tranca de Unduavi (En el lugar hay un cuadro de Bienvenida como referencia). La primera media hora es una subida pedregosa en la que hay que tener cuidado y llevar zapatillas especiales, el viaje es largo pero divertido. Subiendo la cima llegamos a tropezar con restos de caminos precolombinos que eran recorridos por Chasquis, anteriormente eran utilizados para el paso de mulas cargadas de coca para los mineros a mediados de los años 1950.

Se sigue caminando en medio de la naturaleza y en el trayecto se puede observar la diversidad de flora y fauna que es imposible resistirse a tomar fotos y más fotos, más si eres un amante de los paisajes naturales pues el lugar ofrece panoramas de 180°.

Después de haber recorrido el trayecto durante 8 horas se acampa y de hecho, existe un lugar de camping para descansar y recuperar las energías consumidas durante la caminata, así mismo también es momento para alimentarse, beber algo refrescante y luego a dormir.

Dependiendo de la época en la que se realiza esta caminata, hay temporadas lluviosas y frías así que lo mejor es prevenir. El amanecer nos regala un bonito día junto al melodioso canto de las aves, eso motiva a continuar nuestro segundo día de caminata, en el trayecto uno se encuentra con ruinas de piedras e interesantes especies de fauna, el resto es bajada y hay que tener cuidado de no resbalar y no apurar el paso.

Es muy necesario caminar hasta la senda del frente para llegar a la comunidad del Chairo, terminando nuestra gran aventura a la espera de nuevos recorridos y fascinantes aventuras que solo nuestra Bolivia nos regala.

Ruta del Takesi

EI camino del Takesi toma su nombre de un caserío ubicado en la ruta. Esta ruta prehispánica es una de las muchas que unían los diferentes pisos ecológicos, las zonas altas, con las cálidas, transitadas, desde tiempo inmemorial, por personas que intercambiaban productos tropicales con productos del altiplano, donde se asentaban las grandes culturas locales. También constituían vías de inmigración y conquista.

Ubicado entre las provincias Murillo (Ventilla) y Sud Yungas (Mina Chojlla), recorre una distancia aproximada de 45 kilómetro atravesando la Cordillera Real de los Andes en el abra del Takesi, a 4570 metros sobre el nivel del mar, aproximadamente el punto más alto del camino.

Es una calzada empedrada durante la época precolombina, gran parte de la cual aún se ha mantenido intacta. Cabe recalcar que esta vía es una de las mejor conservadas en la actualidad. EI tramo comprendido entre la mina San Francisco y Mina Chojlla se conoce ahora con el equivocado nombre de Camino del Inca.

El Takesi sólo corresponde a un tramo, de uno mucho más largo que unía el valle de La Paz con los llanos orientales según el arqueólogo Oswaldo Rivera Sundt, este camino tiene cuatro tramos identificados:

El primero que nace en el valle de La Paz, para dirigirse a las alturas de Pampahasi en dirección a Ventilla y/o Mina San Francisco.

El segundo tramo corresponde al camino del Takesi,que parte de las proximidades de Mina San Francisco hasta la localidad de Mina Chojlla y continúa hasta Yanacachi.

El tercero, se inicia en Yanacachi para internarse hacia el pueblo de Chulumani.

El siguiente tramo, que parte de Chulumani, se internaría en el río de La Paz para dirigirse a la zona yungueña de La Asunta, y desde allí internarse en Alto Beni.

En la actualidad, estos últimos tramos se han perdido o permanecen ocultos entre la espesa vegetación; sin embargo, la apertura de caminos en la región de los Yungas ha provocado que éstos entren en desuso.

El viaje se inicia en la ciudad de La Paz, en la calle Luis Lara, esquina Benancio Burgoa, de la zona de San Pedro, parada de transporte público hacia la zona de Palca. Estas movilidades hacen un recorrido diario La Paz-Palca. En el camino, bajamos en la localidad de Ventilla, a 33 kilómetros de la ciudad de La Paz.

ECOVIA

Partimos desde Chuspipata, exactamente desde el campamento de la ABC. Por el camino de la izquierda que sube un poco, son 18 KM el primer día.

El camino ya no es una senda, ahora es un camino de autos que va a un campamento minero. No hay lugar para acampar, salvo a un costado del camino, lleno de piedras.

Apartado de la monotonía de la ciudad, entre neblinas y un paisaje tan maravilloso que ofrece este valle yungueño, uno es sorprendido por los paisajes que ofrece este hermoso recorrido lleno de historia y mitos, donde encontraremos enigmáticas cascadas y sitios aptos para la caza fotográfica, además si eres amante de lo desconocido y la aventura, lo que llegaras a encontrar en este recorrido es justo lo que buscabas.

La ruta que hoy en día es conocida como la Ecovía Chuspipata a mediados de (1966-1969) estaba en planes unir la ciudad de La Paz con los Yungas con una vía de trenes que recorrería por estos caminos, 40 años después esta ruta es convertida en una Ecovía, donde muchos visitantes en busca de aventurarse recorren sus pintorescos senderos, donde es muy posible observar arroyos, fuentes y maravillosas cascadas que se pierden dentro el follaje yungueño. Los cambios que se logran percibir son muy cambiantes, esto debido a la situación geográfica donde se encuentra la zona, por pertenecer a un lugar subtropical y lluvioso que se une al sistema ecológico de la selva húmeda montañosa.

Todo esto es razón suficiente para convertirse en un atractivo turístico de la zona que es muy frecuentada por mochileros y turistas al paso que desean conocer de estos lugares y sus enigmáticos paisajes, antes de iniciar esta gran aventura es muy indispensable seguir las siguientes recomendaciones: Ya que por el lugar no existen lugares de dispendio es mejor salir preparado, podríamos abastecernos llegando a Yolosa ya que es un lugar transitable donde podríamos realizar algunas compras.

El recorrido es largo y agotador así que es recomendable que en la mochila no falte agua, por los días de caminata el cuerpo debe recuperar fuerzas y alimentarse se recomienda llevar enlatados, frutas, pan y raciones secas, también será necesario contar con algunas calorías así que no está demás llevar algunos dulces y chocolates, no olvidemos cargar con una bolsa para toda la basura.

Camino del Yunga Cruz

Una de las más importantes vías prehispánicas es la que parte de Chuñawi, en las cabeceras del cantón Lambate. Son tres días de trekking en los que el visitante recorre prácticamente todos los pisos ecológicos que manejaron las culturas Tiwanacu e Inca. Desde los 3.800 metros de altura hasta los 1.900 en los que se encuentra Chulumani.

La vía más directa para llegar hasta Chuñawi son los buses que salen a Lambate, en la esquina Luis Lara y Venancio Burgoa en San Pedro alto, Plaza Líbano. Salen a las 6 a.m. El acercamiento demanda entre 5 a 6 hrs pasando por Uni Ventilla, Mina Bolsa Negra detrás del Illimani.

Yunga Cruz de La Paz, camino precolombino que comienza en la población de Chuñavi, haciendo un recorrido de singulares características por un paisaje casi intacto, con la ocasión de ver monos y aves muy cerca de la ruta, afirmando de esta forma se tiene la posibilidad de tener un verdadero contacto con la naturaleza. A su vez, el trayecto es acompañado por el majestuoso Illimani o montaña resplandeciente. Así la ruta desciende desde la zona cordillerana hasta las tierras bajas de los Yungas mostrando la grandeza de la comunicación vial prehispánica. Su recorrido no es frecuente, razón por la cual es de difícil acceso en la época lluviosa del año.

Tiene paisajes de Cordillera y Yungas que permiten contacto pleno con la naturaleza, a través de su flora y fauna. Miradores naturales y restos arqueológicos.